HERMOSA SENCILLEZ
En el Museo de la Universidad de Salamanca se conserva una tabla con la representación de la Anunciación, en la que destaca el intimismo y recogimiento que transmite, logrado en gran medida gracias a la sencillez y economía de los elementos que la componen.
GUSTOS ITALIANOS
A comienzos del siglo XVI en España se produce una convivencia entre el tardogótico y las primeras influencias italianas, del primer Renacimiento. Las influencias quattroccentistas de Florencia y Umbría se instauraron primero en los entornos universitarios como Salamanca, donde ya se había asentado la ideología humanista propia de este estilo.
RECIBIENDO NOTICIAS
La tabla de la Anunciación representa una estancia en la que existe una clara búsqueda de la perspectiva; se sitúa la Virgen María en una bella actitud, orando ante un reclinatorio y bajo gran dosel de color rojo. Posteriores repintes, que no se han podido eliminar en las restauraciones efectuadas, impiden ver la indumentaria de la Virgen, que cabe pensar fuese uno de los característicos paños con brocado de oro.
EL MENSAJERO
Sobre la Virgen, el Espíritu Santo en forma de paloma y a su derecha, de riguroso perfil y arrodillado, el arcángel san Gabriel que, representado en forma humana (joven, imberbe y con largo y dorado cabello) y vestido con túnica talar blanca y manto rojo con bordes animados con decorada orla, porta sus consabidos símbolos: la vara o palo de mensajero, en este caso rematado con una flor de lis, y una filacteria desplegada con el texto de la salutación; además, en la parte inferior aparece un jarro con azucenas, atributo también del arcángel.
UNA NUEVA AUTORÍA
En cuanto a la autoría de esta bella tabla podemos decir que ha sido tradicionalmente atribuida a Juan de Borgoña, mientras que recientemente parece que se atribuye a su discípulo Francisco de Comontes. Parece que es el último seguidor de Juan de Borgoña, al trabajar en el segundo tercio del siglo XVI en Toledo. Mantiene el estilo elegante de su maestro, pero Comontes ya introduce la nueva forma de pintar de Rafael. Conoce a este último e imita sus tipos humanos idealizados de expresión contenida y gran elegancia, pero con un carácter más monumental por la volumetría y estatismo propios de su formación escultórica.
SOBRIEDAD COMPOSITIVA
Juan de Borgoña dominaba la utilización de la perspectiva artificialis italiana para construir un espacio verosímil, recurso que se fusionaba con el minucioso detallismo flamenco al llenar el escenario de ornamentaciones para satisfacer el gusto por el lujo hispano. Pero ya en el segundo tercio del siglo XVI, se fue perdiendo la riqueza decorativa flamenca frente a la sobriedad italiana, mientras que las composiciones se volvieron más sencillas, sin demostrar la misma corrección en cuanto a la perspectiva. Esta transformación responde a una religiosidad más austera que apuesta por una escena intimista y recogida donde las figuras ocupan todo el espacio.
LA INFLUENCIA DEL MAESTRO
Juan de Borgoña tuvo un gran éxito y demanda por todo el reino, estableciendo un amplio taller con muchos discípulos que repetían sus modelos, lo que llegó a ocasionar incluso quejas de los promotores ya que, pese a su gran calidad, no consiguió continuar su evolución desde las primeras influencias quattroccentistas de Piero della Francesca y Melozzo da Forli hacia el Renacimiento más puro.
Por el estilo similar de esta obra a otras de la primera época de Francisco de Comontes, aun completamente deudora de la tradición de Juan de Borgoña, se ha atribuido recientemente esta tabla de la Anunciación a Comontes, aunque con un recuerdo claro de la influencia de su maestro.
Juan de Borgoña
c. 1520-1530
Óleo sobre tabla
Museo de la Universidad de Salamanca